El encuentro fue en la sala C1 del GAM, a las 17 horas del sábado 2 de diciembre. En la sala, se reunieron el ilustrador de Varúa Rapa Nui (Rapa Nui Press, 2012) y creador de Miguel de Fuentesanta (Mithyca Ediciones, 2011), Ismael Hernández; el autor de El martillo de los brujos: Crónicas de la Recta Provincia (RIL editores, 2014), Sebastián Jorquera; la escritora de Maleficio: El brujo y su sombra (Loba Ediciones, 2016), Claudia Andrade Ecchio; y el autor de Hijos de la Ira (Loba Ediciones, 2017), Andrés Urrutia Ortiz.

El conversatorio, guiado y convocado por la editora de Loba Ediciones, Daniela Cortés del Castillo, buscó rescatar las experiencias de búsqueda e investigación de cada uno de los autores y generó dinámicas sumamente estimulantes; Andrés Urrutia indicó que “los mitos de la zona centro son súper localistas” y, al ser consultado por cuáles fueron sus motivaciones iniciales para escribir su ópera prima, el sociólogo indicó que “más que una novela mítica, quería hacer una novela histórica”. Además, respecto del trabajo de los demás autores, rescató que “cada uno tomó el mito de los brujos y le dio su propia vuelta”.
Claudia Andrade señaló que a diferencia de las demás novelas, la suya busca hacer situar al universo de los brujos desde el hoy; por eso, “tomé la historia de los brujos pero sólo como un diálogo para ampliarlo hacia algo nuevo; es un juego literario, de metaficción”.
Ismael Hernández contó una experiencia vinculada a cómo él interpretó visualmente a la Pincoya, con cola de pez, y a una mujer que se le acercó en una feria anterior para manifestarle su profundo desacuerdo con la versión ya que “la Pincoya no tiene cola”. En ese tenor, explicó que “de alguna forma, el respeto a la versión original del mito es importante pero uno puedo tomarse licencias siempre que exista coherencia”. Asimismo, Sebastián Jorquera resaltó que “el conflicto de bien y mal no es el eje de la mitología prehispánica, sino el orden y el caos”; desde allí, el ejemplo de Caicai Vilú y Trentren Vilú, en la Isla de Chiloé.

Te invitamos a revisar el registro completo del conversatorio en este video.